Se han cumplido seis años de la Reforma Laboral llevada a cabo por el actual gobierno, su objetivo según establece en su preámbulo fue “establecer un marco claro que contribuya a la gestión eficaz de las relaciones laborales y que facilite la creación de puestos de trabajo, así como la estabilidad en el empleo que necesita nuestro país”. Algo que se ha quedado en una bonita declaración de intenciones y que está lejos de lograrse todavía.
La situación con respecto a hace seis años es objetivamente mejor, es difícil pensar que no se mejoraría dada la situación de partida. La pregunta es si la mejora que podemos observar es consecuencia de las medidas que implementó la Reforma Laboral, o es consecuencia de la mejora que se ha producido en el conjunto de economías de la Eurozona, y de viento en las velas que ha supuesto en la de nuestro País: la bajada de tipos, la compra de deuda por el BCE y los precios bajos de los combustibles, que han favorecido el crecimiento económico. SIGUE EL ARTICULO EN EL PDF